Modificación de Conducta
¿de qué se trata?
En ocasiones es necesaria la ayuda de un profesional.
Este tipo de trabajo puede ir desde corregir una simple costumbre como tirar de la correa o comer del suelo hasta un trauma profundo como el miedo a los cohetes u obsesión por las luces o sonidos. Todo depende del carácter del ejemplar ya que, según afronte los problemas, deberemos actuar de una forma u otra para ayudarle a comprender la situación.
Podemos notar que nuestro perro tiene síndrome por separación no sólo debido a que se angustie al estar solo o rompa cosas después de irnos. También es un síntoma muy típico el que esté siempre junto a nosotros incluso estando con otros perros o personas.
No desesperes. ¡Tiene cura! Es cierto que es uno de los problemas más difíciles de solucionar porque su raíz es una fuerte desestructuración de su estructura social y objetivos de vida. Necesitaremos emplearnos a fondo en crear una buena relación que ofrezca liderazgo, entretenimiento y motivación.
¡Sí! Es un comportamiento que tiene solución, excepto algún caso muy extremo. Cabe decir que la inmensa mayoría de perros no tienen verdadera agresividad sino inseguridad.
En la naturaleza la mejor defensa no es atacar pues dependen de ellos mismos para sobrevivir y a nadie le apetece salir a cazar mañana con un herida en la pata. Así que cada especie tiene su forma de aparentar fuerza: con pelaje erizado, con plumas llamativas, con colores que alertan del peligro….
En el caso de los perros, lo hacen enseñando las encías, gruñendo y dando bocados de advertencia. Si cruzan ese extremo de advertir es síntoma de un grave desequilibrio cuya razón será la que debemos identificar para tratarla y cortar el problema desde la raíz.
En cualquier fobia a ruido o movimiento espontáneo u objeto existe un detonante y antes de tratarlo debemos identificarlo para saber el motivo que lo causa y cómo tratarlo.
Lo que sí es aconsejable no hacer nunca bajo ningún concepto es intentar acariciar o calmar al perro pues percibirá inseguridad en nosotros creyendo que también nos preocupa y normalmente se acentuará.
Tenemos que entender que normalmente entran en ese bucle a causa de sentirse desprotegidos por no vernos como el guía que necesitan. Por lo tanto, antes de probar nada deberíamos sanear la relación. Sólo así estaremos en posición de influir de manera positiva en su vida.
Si partimos de una relación equilibrada en la que tenemos influencia en nuestro compañero hemos de identificar el posible motivo de su conducta, cuándo comienza, cómo… Sólo entonces sabremos como poder ayudarle.
Aunque tengamos una buena relación deberemos cerciorarnos de que nuestro vínculo es más fuerte que ese estímulo que actúa como detonante al TOC pudiendo interferir esta estereotipia con una corrección efectiva. Además esto puede ser una señal de aburrimiento o insatisfacción y falta de objetivos en su vida.